jueves, 3 de mayo de 2018

Soy periodista porque

Es bastante evidente que si te dan a elegir entre una profesión u otra, la de periodista es una bendición de Dios. Todo el día únicamente dedicado a la escritura, da igual del tema que sea, hablando con este, concertando la entrevista con aquel o aquella, yendo a una rueda de prensa, asistiendo al acto, investigando un asunto. Soy periodista básicamente porque no tengo que hacer grandes esfuerzos físicos. No tengo que hacer alardes, cargar con cosas, no requiere una excesiva actividad manuel, perdón, manual. Un título de mecanografía hace que agilices todos los procedimientos, escribes más rápido, la faena sale antes. 400 palabras. Ya las tengo.
Soy periodista. Pero no soy periodista. No soy periodista porque básicamente infrinjo uno de los principios fundamentales de la profesión. No soy una persona curiosa. No pregunto. Si se fijan, voy a los sitios y cuento lo que veo pero sin hablar con nadie, no pregunto, no me acerco, me da una vergüenza espantosa. El periodista no debe tener vergüenza jamás. Y yo carezco de eso que se llama... no sé ni cómo se llama. Don de gentes. Capacidad para preguntar, para investigar. Reportajes de investigación. Hay un tema. Entrevisto a uno, al otro, contrasto opiniones, contacto. Contactar.
El verbo contactar. El verbo que todo periodista debe manejar como el agua que respira. Contacta con tal, le llamas y quedas. Contactar. Hola, soy tal, le llamo de tal medio. Periodista.
Soy periodista. Pero a mí no me llama periodista ni mi padre. Ni ahora ni antes. Y no sabría hacer otra cosa. No sé hacer otra cosa. He leído que Xi Jinping ha creado su propio pensamiento, como Mao y como Deng. Yo tengo mi propio periodismo, un periodismo inservible. Inútil. Distraído. Novelesco. Con la intención de arrimar siempre el ascua a mi sardina. Un periodismo que consiste en hacer lo que me da la gana, que suele ser lo que le da la gana a otros. No tengo opinión. No tengo criterio. Me da igual, lo que me echen. No he trabajado de periodista en mi vida. Bueno, muy pocas veces. Y creo que lo hago tan mal que no puntúa. De hecho puntúa poquísimo.
Un periodista. El periodismo. Conozco a periodistas. Algunos tienen el título, otros no lo tienen. Yo tengo el título. Todos los días te preguntas cómo narices se hace para vivir de esto. No sabes vivir de esto. De qué coño piensas vivir. Un periodista que no contacta con nadie. Que no habla con nadie. Que no se acerca a nadie a saludar porque cree que es invisible. Un periodista al que nadie se acerca a proponerle un tema porque saben que no eres la persona. No eres el periodista.
Tengo un carnet del Col.legi de Periodistes por si acaso. Qué haces ahí sentado. Pero no lo utilizo nunca. Soy periodista para ir de vez en cuando a sitios por la cara. Soy periodista pero no me sabré ganar la vida con esto en la vida jamás. Soy periodista porque soy un inútil. Soy periodista porque creo que leer un libro es trabajar. Soy periodista porque no me gusta trabajar. Tengo un compañero que siempre dice que no trabajo. Y tiene razón. No sé cambiar un aparato por otro aparato. No sé llevar una cosa de un punto a otro. No sé hacer la instalación de un teléfono. No sé hacer un balance contable. No sé doblar el lomo. No soy un trabajador. Soy periodista. Y no soy ni siquiera un periodista. No sé atender un teléfono, no sé clasificar, no sé ordenar, no sé curar a nadie de nada, no he enseñado nada bien en la vida, no he dado ostias en una manifestación, no he sellado un impreso, no he vigilado, no he cambiado la bombilla, no he apretado el grifo, no he pintado, no he enracholado, no he alicatado, no he estado en la cadena de montaje.
Soy periodista. Y no lo sé hacer. Soy periodista porque en ninguna otra profesión admitirían a gente como nosotros. Los que estamos al límite de la inutilidad completa. Los que creemos que podemos ir a un sitio, pasear por la calle, mirando por la ventana, contarlo y que eso le interese a nadie. Los que tenemos un teclado, un boli o un micrófono para poder difundir nuestra visión chorra de la vida. O la visión que otro quiere que difundamos. Periodista. Periodista deportivo. Periodista cultural. Periodista científico. Periodista económico. Periodista ecuménico. Periodista leninista. He conocido a muchos que han pasado de esta profesión como de la mierda. Con tanta razón. Otros y otras que han hecho carrera. Otros y otras que no sé cómo estarán.
¿Dónde estarán mis compañeros de facultad? ¿Los compañeros de otros curros? ¿Trabajan de esto?
¿Yo les puedo decir que trabajo de esto?
Soy periodista porque no sabría hacer otra cosa. Soy periodista porque puedo decir que soy periodista aún a sabiendas de que no lo soy. Soy periodista porque esto lo puede hacer cualquiera. Eres periodista cuando no puedes ser ninguna cosa. Eres periodista cuando te sacas el título. Eres periodista cuando tienes voluntad. Eres periodista cuando eres capaz de contar cualquier cosa de cualquier manera para que lo entienda quien te pega, quien te paga, quien te escucha.
Por una vez no he utilizado lo del emisor, receptor, mensaje. Hasta el final.
Soy periodista porque para que otro sea el emisor, ya lo hago yo.
Y por lo de mover cosas. Si hubiera que llevar peso, veríamos. Veremos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario